Borgos Pieper fue encargado para diseñar una residencia y centro de cuidado de personas mayores con tecnología para ser totalmente sostenible de forma pionera con vistas al mar en la Isla de Wight. El desarrollo de cuarenta unidades proporcionará atención de veinticuatro horas a los residentes en un edificio moderno y sostenible que utiliza tecnología de prefabricación de madera para crear apartamentos que permitan la independencia y la autosuficiencia mientras comparten servicios en un entorno ajardinado y dramático con vistas a la costa norte.

La sección del edificio corresponde a  los límites establecidos por las propiedades vecinas. La recepción del volumen principal y las áreas comunes están en la parte delantera del sitio y el máximo uso del espacio verde ha sido posible envolviendo los volúmenes a lo largo del extremo oriental del sitio ofreciendo un jardín de escala íntima hacia el este y un entorno común más grande para un parque  hacia el Oeste.